Inspección Profesional de Propiedades

En el caso de viviendas nuevas (obra nueva): usted debe hacer la revisión de su inmueble antes de la recepción conforme (firma de acta de entrega).
No obstante, si usted ya ha recepcionado su inmueble y desea hacer la revisión, nuestros profesionales están capacitados para identificar fallos en el proceso de construcción, acabados, artefactos e instalaciones, discriminando aquellas que sea ocasionado por el uso y/o desgaste normal del mismo, pudiendo hacer valer las garantías.
En todos estos casos, Inspect Home emitirá un sólido informe para que su inmueble sea corregido conforme a las garantías vigentes.

En el caso de viviendas usadas (segunda mano): usted debe hacer la revisión del inmueble antes de presentar una oferta por la vivienda, ya que con nuestro informe usted podrá recién identificar si el estado del inmueble, los fallos detectados y sus costos de reparación, se encuentran ajustados a sus expectativas.

Inspect Home no limita la inspección en tiempo, dado que nuestro protocolo de calidad y efectividad contempla la revisión completa y exhaustiva del inmueble, donde el tiempo de inspección varía según cantidad, tipo y nivel de investigación requerida de cada hallazgo, sin considerar el tamaño del inmueble.

Inspect Home no trabaja contra reloj.

En promedio nuestro servicio tiene una duración de 2 horas por cada 100m².

NOTA:
Para obtener mayor precisión, puede consultar con nuestra área de “atención en línea” de nuestro sitio Web.

Si bien toda proceso cuenta con una programación con tiempos asignados, usted  como potencial comprador tiene la libertad de solicitar el tiempo que estime necesario para la revisión de un bien adquirido o con la intención de adquirirlo.

Por lo anterior y con el objetivo de ser un facilitador de buenas experiencias, Inspect Home recomienda informar a la inmobiliaria, agente o vendedor sobre la presencia de Inspect Home y el tiempo estimado de inspección, con la mayor anticipación posible, para que así puedan programar la visita sin ocasionar malas experiencias

• • Cotice, busque con calma e infórmese.
  • Observe el entorno de la vivienda, fíjese si cuenta con equipamiento y servicios, que tenga buena conectividad con el resto de la ciudad, cercanía a colegios, mercados, transporte, centros de salud, entre otros.
  • Quien compra una vivienda tiene derecho a solicitar toda la información relevante sobre la casa o piso que va a comprar.
  • Esto significa, por ejemplo, que la publicidad sobre la vivienda no debe omitir ningún aspecto importante, ya que todo lo que se anuncia o publicita, es como si estuviera escrito en el contrato y debe cumplirse.
  • Si la empresa inmobiliaria o el gestor promete en su publicidad, áreas verdes, salas de eventos, piletas, seguridad u otras características asociadas a la vivienda como el tamaño, o incluso si determinada “vista” es parte de la oferta, debe cumplirlo o de lo contrario comete una infracción.
  • Asimismo, la empresa debería entregar información clara (unidades disponibles) sobre aquellas ofertas de viviendas ofrecidas “desde” un determinado precio.
  • Guarde folletos o avisos publicitarios que le permitan exigir el cumplimiento de lo ofertado.

Revisión de la documentación de la vivienda (antes de firmar).

• Nota simple del Registro de la Propiedad: en la nota podrá corroborar quién es el actual propietario, las limitaciones de uso del mismo, así como posibles afecciones fiscales.

• Escrituras públicas previa: aunque el agente vendedor en ocasiones no acostumbra facilitar estos documentos, la revisión de las escrituras públicas mediante las que adquirió el inmueble es de mucha utilidad, para verificar entre otras cosas, la descripción exacta del inmueble, sus linderos, el límite de alguna servidumbre, la declaración de una obra y muchas otros antecedentes.

• Catastro: la información catastral y en particular, la superficie catastrada y los lindes de la finca, deben verificarse siempre con la del “Registro de Propiedades”, ya que en España es habitual que no coincidan, al tratarse de bases de datos externas y no necesariamente se encuentran actualizadas o simplemente coordinadas con otras fuentes de datos.

• Actas de comunidad de propietarios: cuando el inmueble se encuentre integrado en una comunidad de propietarios (un edificio, urbanización, complejo inmobiliario o un conjunto), donde existen elementos de común para todos los miembros de la Comunidad (piletas, jardín, ascensor, patio, juegos infantiles, seguridad, etc.), es recomendable revisar las últimas actas de la junta de propietarios. Estas actas señalan los acuerdos que la comunidad ha adoptando a lo largo de su vida, también podrá averiguar si existen derramas importantes que afrontar, deudores, procedimientos judiciales abiertos y otros antecedentes que, nos pueden decir mucho acerca de la situación actual del inmueble con la comunidad o la comunidad con otras entidades.

• Certificado urbanístico: estos certificados, expedidos por los departamentos de urbanismo de los ayuntamientos, nos informan sobre las características urbanísticas de los inmuebles y, en particular, sobre la calificación urbanística del suelo (urbano, rústico, etc.) y sobre las restricciones de edificación del mismo.

 

IMPORTANTE:

EN toda compra de una vivienda, el comprador adquiere la propiedad en el estado actual a la fecha de compra y esto incluye las deudas que este pueda tener, por lo que es de suma importancia considerar los siguientes puntos.

• Certificado de estar al corriente de deudas frente a la comunidad de propietarios: cuando el inmueble sea parte de una comunidad de propietarios (edificio, urbanización o complejo inmobiliario), a la Junta de Propietarios se le podrá solicitar un certificado que acredite que el vendedor está al corriente en el pago de los gastos generales de la comunidad, pues el comprador va a responder de las deudas con la comunidad del anterior o anteriores propietarios con un límite que se extiende a la parte del año en la que se adquiera el inmueble y a los tres años anteriores.

• Certificado de estar al corriente de deudas tributarias: importante comprobar que el propietario está al día en el pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), ya que el inmueble responde de dichas deudas.

• Licencia de alquiler turístico: en caso de que el inmueble disponga de una licencia turística y si el objetivo del comprador es continuar dicha actividad, habrá que revisar si la titularidad de la licencia existente, puede cambiar de titularidad. Las normas administrativas en materia de turismo, puede variar en cada localidad y comunidad autónoma.

• Si la propiedad no dispone de licencia turística y pretende obtenerla, es aconsejable realizar un análisis urbanístico previo, para comprobar si el inmueble es apto para su explotación como vivienda turística según el plan municipal.
• Licencia de actividad: cuando se trata de locales destinados a una actividad económica y sea intención del comprador adquirir la licencia de actividad existente, es necesario revisar la normativa local para revisar la viabilidad del traspaso de la licencia.
• Libro del edificio: respecto de edificaciones recientes sujetas en su construcción al Código Técnico de la Edificación (CTE). El libro contiene, entre otros datos, la descripción del edificio y sus componentes, normas de uso, conservación y mantenimiento, así como también las normas de actuación en caso de siniestro o situación de emergencias, además de la correcta relación de las garantías que los propietarios disponen sobre la calidad de las actividades de los agentes que intervinieron y de los materiales que emplearon.

Dependiendo de si la vivienda es nueva o de segunda mano, usted tiene derecho a la garantía.

En viviendas nuevas:

• En los acabados, durante el primer año.

• Problemas en las instalaciones durante los primeros 3 años.

• Problemas estructurales y durante los primeros 10 años.

En viviendas de segunda mano:

• Es de suma importancia verificar las clausulas y obligaciones que se incorporan en el contrato de compra/venta.